"La Maestra Esta Enojada"
—¡Suficiente!
De repente, una ola de presión aún más poderosa pasó sobre ellos. Moqi Tingfeng apareció lentamente sobre nubes negras, su mirada disgustada recorrió a Yuan Chu.
— Siendo descortés, ¿Aún no te retiras?
Solo ahora Yuan Chu se dirigió hacia él mientras ella estaba parada detrás de Moqi Tingfeng.
Jiang Li saludó a Moqi Tingfeng.
— Maestro de secta, ¡tienes que darle justicia a nuestro joven maestro, por favor! Nuestro joven maestro es claramente más fuerte que esa persona, pero fue herido por él. Definitivamente cultiva algunas habilidades dañinas. ¡Pido al Maestro de Secta que rechace las resultados de competencia de esta persona!
— ¿Por qué?
Yuan Chu no pudo evitar proteger a Ye Chen Yuan.
— Ambos están inconscientes en este momento. ¡A lo mucho, es un empate!
— Hmph. Nuestro joven maestro no perdería. ¡Un empate es aún más imposible!
Sin embargo, en este momento, el inmóvil Ye Chen Yuan tosió dos veces. El sonido pareció particularmente repentino en el momento. Todos miraron por encima. Simplemente no podían creer que Ye Chen Yuan no se hubiera desmayado después de una lesión tan grave...
— ¿Estás bien?
Al escuchar su voz, Yuan Chu corrió apresuradamente al lado de Ye Chen Yuan. Pero al ver esto, Moqi Tingfeng la detuvo. Les dijo a todos.
— Las reglas de la competencia dicen que cualquiera que pierda el conocimiento, muera o se caiga de la plataforma pierde. Si este niño aún puede ponerse de pie, esta ronda es su victoria
— ¡Maestro de Secta!
Jiang Li estaba muy insatisfecho. Si se tratara de una secta ordinaria, la otra parte habría dado la cara a la familia Jiang y seguiría la corriente para rechazar los resultados de competencia de Ye Chen Yuan, permitiendo que la familia Jiang ganara. Sin embargo, la otra parte era el maestro de secta de las Mil Espadas. El era la cabeza de las diez grandes sectas inmortales, y era famoso por seguir las reglas. Parecía que si el oponente se levantaba, entonces la familia Jiang perdería hoy...
Pensando en esto, miró furioso a Ye Chen Yuan quien yacía ensangrentado en el suelo. ¡Todo fue por este mocoso! Si no fuera por él, basado en el verdadero poder de su joven maestro, ¡definitivamente podría haberse convertido en el discípulo interno del maestro de secta!
Si las miradas mataran, Ye Chen Yuan habría muerto cien veces en ese momento.
Pero él no se rendiría.
En ese momento, Ye Chen Yuan estaba en un estado completamente inconsciente. Sin embargo, escuchó una frase. Eso era, mientras él se pusiera de pie, tendría la victoria...
Pensando en eso, sus manos se apoyaron contra el suelo. Una de sus manos estaba torcida en una posición extraña. Los espectadores sintieron dolor con solo mirarlo.
¿Por qué era eso necesario? Al encontrarse con una familia influyente como la familia Jiang, una persona inteligente podría haberse rendido directamente. Si la familia Jiang recordara su amabilidad, tal vez hubiera obtenido aún más beneficios. Sin embargo, este tipo no lo entendió. Insistió en chocar con su joven maestro. Ahora, incluso si ganara, se convertiría en blanco de críticas públicas. Tal vez ningún maestro de pico se atrevería a aceptarlo.
Ye Chen Yuan sacudió la cabeza. Todo apareció en doble visión. No podía ver a nadie con claridad, ni podía averiguar dónde estaba. Solo sabía que su mar de conciencia estaba herido, y sentía que su cabeza se partiría. Solo sabía que realmente quería simplemente acostarse y dormir, nunca despertarse.
Sin embargo, en ese momento, olió una dulce fragancia lechosa. Esa fragancia era la dulzura que nunca antes había sentido en sus diez años de vida fría y desolada...
Quería retenerlo para siempre. ¡Tenía que ganar! ¡Finalmente, Ye Chen Yuan se puso de pie!
Incluso con heridas en todo el cuerpo, todavía se puso de pie. ¡Esta fuerza de voluntad fue realmente admirable!
Moqi Tingfeng entrecerró los ojos. A pesar de la expresión sombría de Jiang Li, dijo con calma:
— Está bien, en esta pelea, Ye Chen Yuan es el ganador.
Con esto, se volvió y desapareció. Y cuando Ye Chen Yuan cayó una vez más, Yuan Chu lo sostuvo de manera estable.
Ahora, Ye Chen Yuan estaba un poco mejor, su cabeza ya no era asaltada con oleadas de mareos. Incluso podía ver la cara de Yuan Chu.
— Maestro…
Se rió con voz ronca.
— Gané...
Después de lo cual, se desmayó y no supo nada más.
Cuando Ye Chen Yuan despertó, el cielo ya estaba brillante. Él entró en pánico y se sentó.
Disgustada, Yuan Chu dijo:
— ¿Quién te dijo que te sentaras? ¡Ve y acuéstate!
Giró la cabeza. Podía ver a Yuan Chu de pie en la puerta con las manos en las caderas. Primero estaba un poco avergonzado y luego ansioso cuando preguntó:
— Maestro, ¿gané?
Yuan Chu realmente no sabía qué decirle. Ye Chen Yuan realmente era una persona muy pegajosa, pero al mismo tiempo, también tenía una buena comprensión de aprovechar las ventajas y evitar las desventajas. Básicamente, tenía dos caras, y astucia. ¿Por qué era que ahora no podía ver a la otra cara, solo a la tonta? ¿Dónde estaba ese protagonista masculino de su última vida que luchó contra ella con ingenio y valentía?
Con preocupación, se sentó junto a su cama.
— ¡Ganar, ganar! ¡Casi pierdes la vida! ¿Y todavía te preocupa la competencia?
Ye Chen Yuan se sintió un poco culpable al ver su ira. De hecho, valoraba mucho su vida. Sin embargo, durante la competencia, solo tenía que recordar que si perdía, alguien elegiría a Yuan Chu como su maestro antes que él. ¡Solo tenía que pensar en esto, y no estaba dispuesto a admitir la derrota incluso frente a la muerte!
Pero bajo la ira de Yuan chu, ¿cómo debería engañarla?
— Maestro...
—¡Hmph! – La cabeza de Yuan Chu se volvió hacia el otro lado.
—¿Maestro?
— ¡Hmph!– Yuan Chu giró la cabeza hacia el otro lado, y sus delicados labios estaban atrapados en un puchero. Esa mirada "diabólica" era muy "aterradora".
Ye Chen Yuan reprimió el impulso de tirar de su mejilla. Bajó la cabeza y dijo sinceramente:
— Lo siento, Maestro. No debería haber sido así. Me equivoqué, no lo volveré a hacer...
Cuando terminó de hablar, tosió un par de veces. Los ojos de Yuan Chu se abrieron rápidamente. Al ver su rostro demasiado pálido, no pudo soportarlo. Era claramente un muchacho joven, pero era más feroz consigo mismo que esos viejos demonios. Fue realmente...
Él ya era así; ella realmente no podía culparlo. Aunque su rostro estaba rígido, su tono se había relajado.
— ¿Realmente no lo volverás a hacer?
— ¡No lo haré! Te lo garantizo, maestro. ¡Nunca te dejaré preocuparte de nuevo!
Yuan Chu lo miró con los ojos muy abiertos.
— ¡Quién está preocupado por ti! ¡Hmph!"
— Sí, sí, todo lo que el Maestro dice es correcto.
Ye Chen Yuan tenía una mirada de completa obediencia. Yuan Chu se dio cuenta de que incluso si quería estar enojada, no podía.
Ella suspiró, su voz llena estaba llena de arrogancia cuando dijo:
— Suficiente, simplemente no seas así en el futuro, ¿de acuerdo? Me asustaste hasta la muerte! ¡Cuando te traje de vuelta, eras como una persona muerta!
Al ver que su expresión tormentosa comenzaba a aclararse, Ye Chen Yuan asintió apresuradamente.
— ¡Definitivamente recordaré las enseñanzas de la Maestra!
Yuan Chu asintió mientras sacaba una píldora medicinal.
— Cómetelo.
Ye Chen Yuan lo comió obedientemente, cumpliendo su papel de niño complaciente.
Yuan Chu volvió a suspirar.
— Suficiente, descansa bien. No vayas a las siguientes competiciones. Te aceptaré como mi discípulo de todos modos.
— ¿Qué?– La sonrisa en la cara de Ye Chen Yuan cambió de repente.
— Yo... ¿por qué no puedo ir?
Yuan Chu puso los ojos en blanco.
—¿Te has visto a ti mismo? Las cien personas restantes son todas las élites del grupo, y las competiciones individuales comienzan mañana. No puedes recuperarte en un día. ¿No me digas que quieres volver a luchar por tu vida?
Solo ahora Ye Chen Yuan se dio cuenta de que no quedaba un rastro de energía espiritual en su cuerpo. Grietas habían aparecido en su mar de conciencia debido a la extrema presión.
Traductora : Canaria y Correctora: Memi